martes, 29 de diciembre de 2009

ESTRATEGIA DEL ACORDEÓN

El acordeón es un instrumento plebeyo, propio de payasos, de músicos callejeros o de bandas de pueblo, de esas que van de feria en feria. Nunca perteneció a una orquesta sinfónica,y ningún compositor conocido compuso obras famosas para él. No fue admitido en sala alguna de conciertos. Con él se tocan melodías populares, facilitas, campechanas.

A pesar de ello ha conseguido desarrollar su propia estrategia para sobrevivir. Cuando le dan espacio toma aire, se expande y, al tiempo que hincha sus pulmones, canta. Si es presionado no se resiste, se pliega blandamente, suelta el aire, pero sigue cantando. Cuando el agobio se alivia, vuelve a tomar aire, incansable, incesante, y nos regala su música otra vez. Y cuando lo cierran, calla hasta que unas manos amigas le reclaman de nuevo.

Este blog también es algo plebeyo. No quiere contener pensamientos serios, ni gran literatura, ni obras de arte, no. Sólo pretende ser una especie de álbum de recortes, donde el antipático pegará lo que vaya encontrando en sus paseos, cualquier cosa siempre que le produzca alguna sensación de placer, diversión o interés.

8 comentarios:

  1. Lo siento Antipático, pero no he podido contenerme.

    No es que me haya aficionado a perseguir a la familia, es que debes reconocer que resultáis ciertamente interesantes...

    Además, ¡qué mayor libertad que a uno no le "moderen" nada! ¿No crees?

    Sólo tuve ocasión de conocer de vista a Josu Loroño, fundador de la Orquesta Sinfónica de Acordeones de Bilbao, y tengo que reconocer me subyugan aún más el bandoneón de Piazzola o la trikitixa de Kepa Junkera. Forman parte de mis debilidades.

    Lo dicho, la estrategia del acordeón apoya el alma del intérprete, y en tu caso y en los anteriores, al convertirse en uno, saben dar el Do de pecho.

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  2. Además de antipático, eres un ignorante que no sabes de lo que hablas...

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  3. Hermosa metáfora y cálida bienvenida, Pablo, y como declaración de intenciones vale su peso en oro ;)

    Josu Loroño tenía su academia de acordeones en el mismo edificio donde trabajaba yo hace años, y solíamos charlar cuando coincidíamos en la cafetería de Espe, en el tercer piso.

    Estoy seguro de que él rubricaría lo que has escrito, porque fíjate si el acordeón es un instrumento plebeyo, que se ha reinventado incluso en formación sinfónica para sobrevivir al avance de los nuevos tiempos que poco a poco lo han ido retirando de las calles.

    Un enorme abrazo

    Jose

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  4. Bienvenido a este mundo de Blogger.....estoy encantada...de poder leerte....me encanta todo lo que nos cuentas...y como lo cuentas...¡¡¡¡¡siempre eres para mí muy enriquecedor...¡¡¡¡ un abrazo Berta

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  5. EN FIN... QUE FÁCIL ES PODER INSULTAR AL CONTRARIO DESDE EL ANONIMATO.... Y QUE VALIENTE.
    NI CASO.

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  6. yo ... eso de que te llamen o tú te creas un antipatico... bueno ... yo no me lo creo , la verdad ...

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  7. tus objetivos me parecen claros y concisos, aunque intuyo en algún momento los saltarás. de todas maneras para eso estan las correcciones de presupuestos, para las desviaciones que se puedan ocasionar...

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