lunes, 16 de mayo de 2011

CUNQUEIROMANÍA (5)

Dibujo de Álvaro Cunqueiro

¡Otra vez! Imagino que eso es lo que habrán exclamado al ver el título de esta entrada, y habrán pensado que, además de antipático, soy un pesado y un rarito, con esa manía que tengo por Álvaro Cunqueiro, al que casi nadie ha leído nunca. No deben pensar eso por el simple hecho de que ustedes no lo hayan hecho.

Como lector que gusta de su literatura, me siendo en la obligación de recordarles que este año se cumple el centenario de su nacimiento. Además he de decirles que no estoy sólo. Le reeditan, le estudian, le filman y, lo más importante, le siguen leyendo y le recuerdan. Sin lugar a dudas se celebrará el centenario y oirán hablar ustedes del escritor gallego este año más veces. Para botón de muestra he aquí enlaces a  alguna de las noticias publicadas en los últimos días (hay muchas más).

ÁLVARO CUNQUEIRO: BEBEDOR DE SUEÑOS






Por mi parte, yo sólo puedo recomendarles que lo lean, y para quien se apunte, un juego: Los personajes de Cunqueiro. Propondré la descripción de un personaje. Los improbables lectores de este blog y del escritor, deben averiguar su nombre. Quien acierte su identidad propondrá otro personaje, hasta que alguien adivine, que será a su vez quien proponga el siguiente personaje, y así sucesivamente. Empezaré con el más fácil:

"El señor XXX, según se sabe por las historias, era hijo de soltera y de ajena nación, y vino heredado para Miranda por una tía segunda por parte de madre; pero hacía de esto tanto tiempo que nadie recordaba bien el suceso. Solamente una vieja de Quintás hacía algo de memoria de que siendo niña la llevaron al entierro de una señora de Miranda, y detrás del cura de Reigosa, que cantaba muy bien, iba XXX vestido de negro, con una gran bufanda colorada, y ya entonces tenía mi amo la barba blanca. Por XXX no pasaban años, y de esto se quejaba como de un maleficio, pero pocas veces, que el ser de él era aparentar muy franco y abierto, contento del mundo y hablador, y sonreía muy fácil; le ayudaban a ser franco los ojos claros, y aquella su frente levantada y señora, y hasta aquel gesto que tenía de acariciarla con la mano derecha cuando te hablaba. Era de pocas carnes, pero muy puesto en sus anchos y gentil, y muy andador..."

¿De quién se trata en esta descripción, que inicia uno de sus libros más famosos?

11 comentarios:

  1. Bien anónimo. Era sencillo. Te toca ahora a tí proponer el personaje cunqueiriano del día.

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  2. Vale, pues ahí va:

    Aterido se sentía el señor XXX de Pontivy al levantarse tan temprano, y más todavía en un tiempo como aquel, vestido de cierzos de la Mancha, lluvias frías atlánticas y calladas y heladas nieblas del río Blavet, que impedían que el sol brillase en el mundo. Sin salir de la cama, muy surtida de mantas, calzaba las medias de lana de Vitré, bien teñidas de morado con palo de Sicilia; se ataba al cuello el babero planchado de almidón, arrojaba el gorro de dormir, se acomodaba el solideo, y aclarándose con el rapé matutito, saltaba del lecho estruendosamente, pateando el suelo, gritando en latín, estornudando, llamando a madame Clementina mientras se apretaba las cintas del calzón del delantal y abrochaba el chaleco de botonadura roja, y por si madame no le había oído, se ponía a repicar la campanilla como acólito de Pascua. Y entraba madame Clementina con sus rizadoras de boj puestas, palmeando como en el teatro porque el señor XXX se había levantado temprano y tan valiente en aquella cruda mañana, y se arrodillaba para abrochar en la canilla los seis botoncitos de plata del calzón de XXX, y mientras lo hacía, XXX apretaba las rizadoras de boj en la cabeza de madame Clementina, pues siempre se le antojaba que estaban algo flojas. Todas las mañanas se repetía esta fiesta.

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  3. Bien amigos, anímense, que Anónimo también ha puesto la cosa bastante facilita. Si no mañana doy yo la respuesta y propongo otro.

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  4. Esa fantasia erotico-platónica del protagonista y madame Clementina creo que pertenece a "Las crónicas del Sochantre"

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  5. Efectivamente Regenta, se trataba de Chales Anne Guenolé Mathieu de Crozon, sochantre de Pontivy. Así que ya sabes, te toca proponer personaje

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  6. "Parece ser, contaba el señor XXX en Sotomayor, que el canónigo conocía las hablas de los demonios, y tenía el oido tan fino que los escuchaba hablar dentro del cuerpo del endemoniado, cuando este dormía..."

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  7. ¡¡¡Venga, señores, que voy a tener que contestar yo otra vez; que no me puedo conteneeer!!!

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  8. Pues ¡ala!, no te cortes y contesta, que con la preguntita Regenta se ha pasado ..., pero de lista, porque se encuentra fácil en Internet.

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  9. En ese caso, le daré la oportunidad de buscarlo a otro participante. Pero no crea, somos algunos los que también hemos leído a Cunqueiro.

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  10. Yo creo, Anónimo, que debes animarnos con tu respuesta. No te hagas esperar.

    Antipático.

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